Los prejuicios de los estadistas con respecto al cristianismo se manifiestan claramente a mediados del siglo 111, cuando Decio y Valeriano, considerando que los eristianos
estaban fuera de la Ley, decían que “había
que buscarlos y exterminarlos”? Eran considerados jefes de una coalición peligrosa
“nefaria congregatio”.
Entendiéndose que
las asociaciones cristianas constituían un estado dentro de
'tenebrosa et lucifuga natio'.
Fil: Castillo de Hiriart, Nelly E.. Universidad de Buenos Aires. Facultad de Filosofía y Letras. Instituto de Historia Antigua y Medieval “José Luis Romero”; Argentina.