Tozzi, María Verónica; Martini, María de Los Ángeles; Lavagnino, Nicolás Alejo; Bevilacqua, Gilda Samanta; la Greca, María Inés; Murad, Omar Alejandro; Pérez, Moira; Taccetta, Natalia Roberta; Zeitler Varela, Mariela; Burstein, Ezequiel; Dranovsky, Gabriela; García, Leandro Daniel; Infante, Brenda Leonela; Li Rosi, Federico; Silverio, Santiago
Abstract:
La presente indagación se inscribe en lo que actualmente se llama “Nueva Filosofía de la Historia” (NFH), movimiento originado por la aparición en 1973 de Metahistory, The Historical Imagination in Nineteenth-Century Europe de Hayden White, y continuado por Ankersmit, Kellner y Jenkins entre otros. Se atiende críticamente a las consecuencias epistémicas de la concepción representacionalista del conocimiento histórico, del ideal de alcanzar “el relato verdadero acerca del pasado”. Lejos de promover el escepticismo se atiende al hecho de que la orientación realista del discurso co-existe con la problematización de los modos en que las prácticas lingüísticas coadyuvan en la delimitación de un concepto operativo de realidad. Realismo se dice de muchas maneras, por lo que lejos de tomar como una piedra de toque aquella orientación, lo que se enfoca aquí es el problema de la representación realista y las formas en que se ha constituido y configurado a lo largo de un recorrido disciplinar de varios siglos. (Auerbach) Advertidos de las numerosas críticas a la NFH, principalmente originadas en lecturas que creen que la aproximación lingüística sólo puede derivar en una consideración idealista de la historia, profundizaremos en las ventajas que la NFH obtiene de estrechar lazos con una consideración pragmatista del lenguaje y de las ciencias en general. Con ello el entero debate entre orientaciones realistas e idealistas se ve reformulado, exigiendo mayor precisión en la delimitación no sólo del concepto de realidad sostenido, sino también de la ontología del lenguaje requerida por tal concepto. la tropología whiteana se propuso originalmente capturar los múltiples recursos de figuración histórica, señalando a su vez el carácter tanto inventado como descubierto de los mismos. Este status dual suscitó una gran controversia dando lugar a dos estrategias crítico-interpretativas: “kantianizante” y “estetizante”. Nuestra propuesta pragmatista formulará críticas a ambas estrategias, la primera ronda peligrosamente el problema de la inconmensurabilidad, la segunda, con su rechazo al giro lingüístico y su clamor de retornar a la experiencia, bordea el subjetivismo y la privatización del pasado (Ankersmit y Gumbrecht). la estrategia pragmatista para abordar el status del análisis metahistórico lograría disipar el temor de la “prisión del lenguaje” contribuyendo a su vez a dilucidar el carácter controversial de la historiografía pero conversacional y antifundacionista.