Abstract:
Hoy en día existe suficiente información confiable para plantear que la
colonización de las tierras altas de los Andes Centro-Sur se produjo a fines del
Pleistoceno. En efecto, evidencias provenientes del norte de Chile y del Noroeste
Argentino fueron fechadas hacia 10.800 y 10.600 anos AP en los comienzos de las
ocupaciones. Hay 11 sitios con contextos bien datados con episodios que comienzanen
esos momentos y que llegan hasta los 7400 AP. Esto permite plantear, entonces,
hipótesis acerca de los modosde vida de los cazadores-recolectores que nos alejen de
los sistemas de clasificación descriptivos utilizados frecuentemente en la arqueología
andina.
Eneste trabajo se analizarán en detalle dos casos localizados en la Puna
Argentina: Inca Cueva 4 y HuachichocanaII]. Es nuestra intención no sólo tratar con
frecuencias óseas, sino, estimar la biomasa animalencada uno de los sitios para evaluar
modelos de disponibilidad ambiental y de explotación económica. Lamentablemente,
no hay informacióndetallada, salvo para Quebrada Seca 3 aún no publicada (Elkin
1992), loque ha llevadoa formular modelos de subsistencia basados en las características
generales de los ambientes y la localización de los sitios (Núñez y Santoro 1988).